Recogemos el Premio Luis Noé Fernández en la categoría de Asistencia Alimentaria

La semana pasada acudimos a Oviedo para recoger el Premio Luis Noé Fernández en la categoría de Asistencia Alimentaria.
El Palacio de Congresos de Oviedo acogió una emotiva ceremonia que, con un aforo más reducido de lo habitual, volvía a ser presencial. Para nosotros fue una oportunidad de conocer al equipo de Fundación Alimerka, su modelo de trabajo y valorar posibles vías de colaboración en un futuro. 
En la gala descubrimos el trabajo que realizan el resto de entidades premiadas. Y el de las entidades galardonadas en 2020, que no pudieron recoger el premio en persona pero tuvieron su espacio. Abrió el acto la Asociación NUPA representada por Myriam, abuela de Matías, uno de los niños que atiende NUPA. La historia de este pequeño nos acercó a la lucha de muchas familias mientras sus niños esperan un trasplante multiorgánico.
El equipo de Valornut, de la Universidad Complutense nos explicó en qué consiste su trabajo de valoración nutricional y anunció que con la cuantía del premio pondrán en marcha un nuevo proyecto para investigar la relación entre la alimentación y las enfermedades como el Alzheimer, un aspecto que nos toca muy de cerca y que seguiremos con atención.
La Asociación LATE Asturias nos llevó con su relato hasta Senegal. Su trabajo sobre el terreno hace que muchos jóvenes opten por no emigrar y comiencen a poner en marcha pequeños proyectos de emprendimiento que permitan el desarrollo de sus comunidades.
Durante la gala de premios Alimerka presentó su nueva campaña ‘Historias que valen tu vale’  una iniciativa que busca dar voz a los invisibles, a aquellos colectivos en situación de especial vulnerabilidad a los que la sociedad habitualmente no escucha. Uno de esos proyectos invisibles es el que desarrolla ALCLES León. Su presidenta Nonia Alejandre, cerró la gala compartiendo su historia de superación y cerrando el acto con un claro mensaje: «Dona médula, dona vida».