Método del Elaboración de Informes Comunitarios (Community Reporting)
18/10/2023
El Proyecto NOI tiene como objetivo entender cómo se puede medir el impacto de las historias, por eso hemos trabajado en un conjunto de herramientas para profesionales y facilitadores que os ayudará a utilizar la narración de historias como una herramienta para la creación y la medición del impacto.
Existen muchos métodos para medir el impacto de las historias. La medición del impacto sigue siendo un reto para muchas organizaciones, pero si se aborda de forma creativa e innovadora, la medición del impacto puede ser un beneficio en lugar de una carga.
Entre los que analizamos en el Toolkit, hay un método en particular al que hay que prestar más atención. Se trata del Método de Elaboración de Informes Comunitarios o Community Reporting.
El Community Reporting se ha desarrollado en toda Europa como un enfoque metodológico mixto para potenciar la participación ciudadana en la investigación, la elaboración de políticas, el desarrollo de servicios y los procesos de toma de decisiones. Utiliza tecnologías digitales y portátiles para ayudar a la gente a contar sus propias historias, a su manera y entre iguales.
Pero, ¿qué es lo que permite que el Community Reporting funcione bien? Por supuesto, tiene que haber una cultura organizativa que acepte los resultados imprevistos y los fracasos; luego, los encargados de recoger las historias deben tener excelentes aptitudes pedagógicas y de comunucación, que demuestren el valor de las historias. Se necesita tiempo suficiente para aplicar el método: según el proyecto, la formación, la recopilación de historias y la búsqueda de sentido, pueden llevar tiempo. Y, por último, debe existir un compromiso por parte de la alta dirección.
Hay dos actividades utilizadas en el Método de Elaboración de Informes Comunitarios que pueden ser útiles para medir el impacto.
Primera actividad: La historia instantánea
Las historias instantáneas recogen rápidamente las perspectivas y experiencias de la gente. Sólo tiene una pregunta y puede ser una buena actividad introductoria para contar historias. En primer lugar:
- Elige un tema pertinente a tu contexto (por ejemplo, medir el impacto).
- Colabora con los narradores para desarrollar una pregunta abierta basada en este tema (p. ej., ¿Cómo te ha afectado el proyecto/servicio/programa? ¿Qué habilidades has adquirido con el proyecto/servicio/programa? ¿Qué has aprendido de esta experiencia)?
- Crea un espacio en el que las personas puedan compartir sus respuestas.
Quizá quieras pensar en cómo conservar estas historias para futuras actividades. Algunas ideas pueden ser:
- La gente podría escribir sus respuestas en notas Post-it y compartirlas en una pizarra, y éstas podrían fotografiarse.
- Los participantes pueden grabar sus respuestas en archivos de audio o vídeo en sus teléfonos inteligentes.
La siguiente actividad es una forma de trabajar con historias para generar cambios.
Segunda actividad: Diálogo de historias
El diálogo de historias, basado en el trabajo de Labonte y Feather (1996), es una forma de trabajar con la experiencia vivida como herramienta de aprendizaje y cambio de manera práctica. Nos ayuda a
- Escuchar activamente las experiencias de las personas.
- Conectar con las experiencias de las personas y relacionarlas con nuestras propias experiencias del mundo.
- Reflexionar sobre lo que hemos aprendido de las historias de las personas y qué acciones futuras pueden suscitar.
Para realizar esta actividad de “diálogo de histrorias”, deberías:
1. Reunir a un grupo de personas a las que te gustaría influir con las historias que has recopilado.
2. Mostrarles una historia, un extracto de una historia o un conjunto de historias breves. Para ello, puedes pedirles que lean historias, vean fotografías o escuchen grabaciones de vídeo y/o audio.
3. Cuando hayan "visto" la historia, pídeles que identifiquen los mensajes clave que contiene. Puedes pedirles que lo hagan verbalmente o escribiéndolos y luego compartiendo sus ideas.
4. A continuación, pídeles que compartan la forma en que las historias resuenan o se relacionan con sus propias experiencias. De nuevo, puedes pedirles que lo hagan verbalmente o escribiéndolos y compartiendo después sus pensamientos.
5. Pide al grupo que identifique los puntos clave de aprendizaje de las historias que se relacionan con el servicio/contexto en el que trabaja y cómo se puede utilizar este aprendizaje. Una vez más, puede pedirles que lo hagan verbalmente o escribiéndolos y luego compartiendo sus ideas.
6. Por último, pide a todos los miembros del grupo que identifiquen una acción clave que puedan llevar a cabo inmediatamente para poner en práctica lo aprendido en los relatos. A este respecto, hay que destacar que todos tenemos algún poder o influencia (por pequeña que sea). De nuevo, puedes pedirles que lo hagan verbalmente o por escrito y que luego compartan sus ideas.
Si quieres saber más sobre cómo medir el impacto de las historias, no dudes en leer el Toolkit.
Foto de Kampus Production: https://www.pexels.com/es-es/foto/mujer-oficina-reunion-espacio-de-trabajo-8353802/